La placa de inducción es un electrodoméstico muy popular hoy en día, con el que cocinar de forma rápida, eficaz y segura. Sin embargo, con este aparato en lugar de la cocina de gas necesitas sartenes para la placa de inducción, con unas características específicas que aseguren una correcta transmisión del calor y ayuden a mantener bajo el consumo energético.
Antes de comprar una placa de inducción, por lo tanto, es recomendable verificar que sus ollas y sartenes sean compatibles con esta tecnología, de lo contrario, solo tiene que comprar utensilios de cocina nuevos adecuados para este electrodoméstico.Averigüemos qué sartenes son adecuadas para la inducción y cómo reconocerlas con precisión.
Características de las ollas de inducción
Una olla para placa de inducción está fabricada con materiales capaces de aprovechar el principio de la inducción electromagnética. En la práctica, la placa de inducción genera un campo electromagnético a través de bobinas metálicas conectadas a la corriente eléctrica, de esta forma, debido a la ley de Faraday, la placa produce una corriente eléctrica que, mediante el efecto Joule, transforma una parte de la energía eléctrica en calor. .
Por lo tanto, se utiliza energía térmica para calentar el recipiente y su contenido, lo que permite cocinar cualquier tipo de alimento de forma rápida y sostenible gracias a la reducción de la pérdida de calor. Este proceso tiene lugar solo cuando se utilizan recipientes adecuados, es decir, fabricados con materiales ferrosos, capaces de aprovechar la transferencia de calor mediante inducción electromagnética.En particular, es necesario utilizar sartenes con fondo de hierro, para que la placa de inducción funcione de manera óptima.
Entre los modelos aptos para la tecnología de inducción existen, por tanto, sartenes fabricadas con diferentes tipos de materiales con fondo ferroso:
- acero;
- acero inoxidable;
- acero esm altado.
Por el contrario, algunos tipos de ollas que se utilizan normalmente en la cocina no son compatibles con las placas de inducción, como las de cobre, aluminio, cerámica, vidrio, latón y porcelana. Estos materiales no pueden iniciar el mecanismo de inducción electromagnética, por lo tanto, no se calientan y no pueden cocinar alimentos. En algunos casos, las sartenes no recomendadas aún permiten cocinar, pero no transmiten el calor correctamente y comprometen el ahorro energético garantizado por la tecnología de inducción.
Cómo saber si una sartén es de inducción
Los utensilios de cocina de inducción se pueden reconocer por la presencia del símbolo con una bobina de metal alargada dentro de un cuadrado con bordes redondeados, un icono utilizado por muchos fabricantes para informar a los consumidores que son utensilios de cocina aptos para placas de inducción. En ausencia de este símbolo u otras indicaciones, la sartén puede no ser compatible con esta tecnología, incluso si está hecha completamente de acero inoxidable pero sin fondo ferroso.
Un truco sencillo para comprobar si una olla tiene fondo ferroso es acercar un imán al fondo, para comprobar si es atraído por la superficie y permanece adherido al acercarse al fondo. En este caso significa que la cacerola es apta para placas de inducción, en caso contrario no se puede utilizar al no contener materiales aptos para activar el calor en la placa.Si el horno de inducción ya está instalado, basta con poner la olla con un poco de agua sobre la placa, comprobando si el led del display parpadea indicando que el utensilio no es compatible.