Reconociendo la sensación de vacío

¿El primer paso para superar la sensación de vacío? ¡Reconócelo! Hay algunos factores clave que te permiten identificar inmediatamente si estás cayendo en una profunda sensación de vacío o si llevas un tiempo en ella:

Despertares lentos y perezosos

Si te das cuenta que al levantarte agarras tu teléfono y pierdes mucho tiempo mirando las cosas de los demás, si te das cuenta que no tienes motivación para hacer las cosas que sabes que tienes que hacer y terminar, si no sientes la alegría de un nuevo día que comienza, bueno, puedes estar experimentando una sensación de vacío que necesita ser explorada y comprendida.

Relaciones insatisfactorias

La relación entre dos personas, ya sea de amistad o de amor, contempla el intercambio. Si notas que lo das todo pero no te escuchan ni te apoyan, si dedicas tiempo y atención a alguien que mantiene una distancia afectiva, si haces balance de tus amistades y te das cuenta de que cuando hace f alta nadie aparece o que nadie tiene en cuenta su opinión, tal vez la sensación de vacío podría surgir o ser alimentada por este estado de cosas.

Estás demasiado detrás de las redes sociales

Si te das cuenta de que le das demasiado peso a un Me Gusta, si te das cuenta de que los comentarios de otras personas cambian tu estado de ánimo demasiado rápido, puede que sea el momento de desvincularte de las redes sociales. Recuerda que las redes sociales no son un mundo real, sino ideal y que las personas dan su imagen, no su verdadera esencia. A menudo alimentamos charlas inútiles, perdemos mucho tiempo y no nos relacionamos en absoluto con las personas que realmente nos importan.También tenga cuidado de no idolatrar demasiado a los cantantes o personas influyentes; dan una versión muy brillante de la vida y te hacen sentir obligado a parecerte a ellos, gastar y prestar atención solo a las apariencias. Recuerda que eres tu propio héroe y no tienes que demostrarle nada a nadie.

Te pones nervioso rápidamente o tienes muy pocas reacciones

Ya sea que pierdas los estribos rápidamente o, por el contrario, nada te toque demasiado, recuerda que no vale la pena volverse demasiado inerte o demasiado estimulado. Trate de no perder demasiado los estribos ante las primeras señales de circunstancias distintas a las que imagina. Si notas que estás perdiendo las ganas y la fuerza para reaccionar y opinar, podrías ir hacia una apatía destructiva.

Superar la sensación de vacío

Primero que nada tienes que tratar de alejarte de todas esas cosas que envenenan y enferman tu alma, todas las personas que mienten, te f altan al respeto y solo piensan en sus asuntos personales.Al hacer este tipo de "limpieza" , obtendrá un espacio personal nuevo y limpio.

Trata también de redescubrir los placeres sencillos de la vida: un paseo, un brindis, una charla con los amigos, un momento solo para ti, una película para ver con los que te quieren, un buen libro para leer y un nuevo proyecto para empezar. Aprende a dar la bienvenida a los momentos en los que no tienes ganas de hacer nada y acéptalos. No te llenes de distracciones, gastos, chismes y charlas, mantente centrado en ti mismo. Puede decidir llevar un diario anotando las diversas sensaciones sin ignorarlas; tomar notas de tus momentos internos te permite no perder de vista tu brújula interna y revisar y seguir tu camino personal.

Para superar la sensación de vacío también puedes pensar en moverte, dedicarte a un nuevo deporte o empezar con algún simple trabajo físico que te haga recuperar la confianza en tu cuerpo y afecte tu sentido de plenitud.Puede disfrutar de algo manual, como hacer un postre o preparar una comida, o hacer algo hecho a mano con el cuidado y la paciencia adecuados. Recuerda siempre que una forma inmediata de reducir el dolor interno y crear alivio es la respiración, que siempre tienes a mano. Aprovecha también tu postura y la atención que le das a tu postura para tratar de darle la vuelta a la situación; atrápate cada vez que sientas que te inclinas hacia adelante y piensa en cómo tu cuerpo ocupa el espacio. Mira cómo te relacionas con los demás, cuánto los invades o cuánto retrocedes. Cierra los ojos cuando puedas y estés solo e intenta relajar la frente; también puedes darte un pequeño automasaje con la respiración adecuada.

También puedes pensar en compartir tu dolor y sensación de vacío con alguien en quien confíes particularmente; podría ser una figura paterna o un experto en el campo de la psique. Aléjate de todas las formas posibles de aquellos que subestiman o menosprecian tu estatus.Cualquiera que le diga que la condición desaparece por sí sola, cualquiera que le diga que se lo está inventando todo, debe mantenerse un poco distante y no actuar como un amigo o apoyo de ninguna manera.

Recuerda siempre que los momentos difíciles salen con mucha paciencia y vuelves a ver la luz con la arena que poco a poco va subiendo. Si está experimentando una fase oscura, sepa que más adelante puede desarrollar una propensión sagrada a ayudar a los demás, como un llamado para ayudar a las personas necesitadas.

Categoría: