Cómo reconocer a la persona adecuada
Nos lo seguimos repitiendo, sobre todo después de las continuas decepciones sentimentales: ¿es posible encontrar a la persona adecuada? ¿Y cómo lo reconoces entre los fuegos fatuos y esos amores imposibles que se alternan en el transcurso de nuestras vidas?
Esto nos lo preguntamos cada vez que miramos, con una pizca de ingenua envidia, a esas parejas de larga data que conservan y mantienen una complicidad impenetrable, y que parecen poseer un secreto que es solo de ellos, y de nadie de los demás.
Esto nos lo preguntamos aun cuando, cansados y fatigados por otro fracaso más, vamos en busca de esa persona, con quien compartir el camino que hemos recorrido solos durante demasiado tiempo.
¿Existe la persona adecuada?
Las desilusiones del amor, las que nos obligan a recoger los pedazos del corazón destrozado, muchas veces nos confrontan con la desilusión. No es tan difícil renunciar al amor, o al menos creer que eres capaz de hacerlo, cuando las heridas que llevamos dentro siguen siendo tan profundas y dolorosas.
Ese es el momento en que dejamos de creer en la persona adecuada, que parece más una figura mitológica que real. Porque si es cierto que habíamos dejado de creer en el príncipe azul, y de pensar que necesitábamos la otra mitad de la manzana para sentirnos completos, también es cierto que la convicción de encontrar a un hombre capaz de compartir parte de ese viaje llamado vida nunca realmente nos dejó.
Pero una pregunta, en este mar de preguntas sin resolver, surge espontáneamente: ¿existe realmente la persona adecuada? Seguramente, al menos una vez en la vida, todos hemos respondido que sí, que lo hicimos cuando nos encontrábamos compartiendo la cotidianidad con ese aquel que hacía latir nuestro corazón, que hacía revolotear mariposas en nuestro estómago y que nos iluminaba los ojos de oro. coposPero la misma persona que no cumplió sus promesas, rompiendo todos los sueños extraordinarios que queríamos compartir.
Porque la verdad es que por inexplicable que sea el amor a primera vista, la química y las afinidades, la persona adecuada es aquella que elige quedarse para construir algo grande, día tras día, destinado a quedarse por la eternidad.
Cómo reconocer a la persona adecuada
Así es como se llega a conocer a la persona adecuada, con tiempo, compromiso y presencia. Porque el latido que nutre esa maravillosa etapa del enamoramiento a veces no es un indicador lo suficientemente claro y, por el contrario, sabe transformarse en un hábil engañador.
Otras veces son las ganas de enamorarse, y el miedo a la soledad, las que nos llevan a pensar que esa persona que de repente llegó a nuestra vida, y la puso patas arriba, es la indicada. Pero lo cierto, como ya hemos dicho, es que sólo el tiempo es capaz de darnos las respuestas que buscamos.
Solo él podrá mostrar y demostrar si, después de una atracción inicial, el amor puede florecer. Uno real y auténtico, hecho de complicidad, reciprocidad y presencia. De cariño y preocupación, de diversión, comprensión, dulzura y amabilidad. Porque el hombre correcto es precisamente eso, el que da la bienvenida a los defectos, antes que a los méritos, el que encuentra soluciones, y no problemas, el que permanece incluso cuando, durante la tormenta más terrible, todos los demás se van.