Francesca Lollobrigida y Gina

Patinadora por pasión -que sean ruedas o palas, le da igual- y múltiple campeona en diversas disciplinas, Francesca Lollobrigida ostenta además un apellido muy importante, que la vincula (por derecho de sangre) a la famosa actriz Gina. ¿Qué sabemos de este joven talento deportivo?

Quién es Francesca Lollobrigida

Promoción de 1991, Francesca Lollobrigida nació en Frascati y usó su primer par de patines a la tierna edad de solo 14 meses (cuando los bebés generalmente comienzan a dar sus primeros pasos).Con estas premisas sólo podía dar grandes emociones a toda Italia, y así fue. Mérito -también- del papá Maurizio, gran atleta en el patinaje de velocidad además de plusmarquista en la carrera de 50 km sobre patines, solo para complacer. Por tanto, está claro que el talento es un asunto de familia, que sin embargo Francesca ha perfeccionado al máximo de sus posibilidades e incluso más allá.

Durante varios años ganó prácticamente todo lo que se podía ganar en el patinaje de velocidad sobre ruedas, llevándose a casa 9 títulos mundiales. Pero en 2006, con la llegada de los Juegos Olímpicos de Invierno de Turín, Lollobrigida dio el s alto y pasó al hielo. Y así fue como, meta tras meta, entre caídas y fracasos, fue afilando sus espadas para convertirse también en un verdadero talento en esta disciplina. Representando a Italia en tres ediciones de los Juegos Olímpicos de Invierno, fue en Beijing 2022 donde finalmente alcanzó su esplendor: medalla de plata en los 3000 metros y medalla de bronce en la salida en masa son victorias que nunca olvidará.Y nosotros con ella.

Francesca Lollobrigida, vida privada

Si estos son, brevemente, sus éxitos en la pista, ¿qué sabemos de la vida privada de Francesca? Comencemos por el apellido, engorroso y muy famoso: deriva de una relación lejana con Gina Lollobrigida: su abuelo por parte paterna es, de hecho, el hermano de la actriz, de quien el campeón es, por lo tanto, bisnieto. Pero entre ellos no existe un vínculo real (si no, precisamente, de sangre). La propia Francesca ha admitido que prácticamente nunca la ha conocido, dado que toda su vida es un torbellino de formación y compromisos de todo tipo.

De hecho, todos sus días están cuidadosamente marcados para garantizar que, como atleta, siempre esté en su mejor momento. Nacida y criada en las afueras de Roma, una vez que eligió las palas, comenzó a ir y venir de la capital a Baselga di Pinè, un pequeño pueblo cerca de Trento que cuenta con una famosa pista de patinaje sobre hielo.Aquí es donde Francesca se formó durante mucho tiempo, para luego aspirar a algo más. Convertida en profesional, empezó a dividirse entre Italia y Holanda (más precisamente Heerenveen), la cuna del patinaje de velocidad.

Pero la vida de Lollobrigida no se trata solo de patinar. Apasionada del deporte en general, es amante de la bicicleta y estudió biotecnología, abandonando su carrera universitaria para dedicarse a la emoción de la velocidad. Además, hace apenas unos meses, se casó con Matteo Angeletti (también patinador): los dos viven en Roma y, por el momento, su familia incluye dos hermosos gatos, protagonistas de muchas de sus fotos sociales.

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