Cremas con efecto hielo, con solo leer el nombre puedes sentir esa agradable sensación de frescura en la piel. Una ligera emoción, una sensación de ligereza que inmediatamente nos hace sentir mejor. Pero, ¿qué son realmente estos productos de belleza con efecto hielo ? ¿Y cómo se usan?
Según los expertos, el frío es bueno para la piel de la cara y el cuerpo : al enfriarse, de hecho, los tejidos pierden sensibilidad y causan una sensación cerebral y física particularmente agradable. Pero la fuerza de los productos de efecto frío reside no solo en la sensación de alivio que brindan, sino sobre todo en la importante acción antifatiga que realizan, revitalizando la circulación y tonificando la piel.
La sensación de frescura intensa está dada por el uso de elementos fitoterapéuticos y extractos de algunas plantas : desde aloe vera hasta centella asiática, desde mentol hasta arándano.
Hay muchos productos con efecto hielo, desde baños de burbujas hasta cremas para el contorno de ojos, desde cremas faciales hasta cremas anticelulíticas . Son productos útiles especialmente para aquellos que realizan trabajos pesados, para aquellos que se ven obligados a pasar mucho tiempo de pie o en la misma posición, para aquellos que a menudo están expuestos a agentes atmosféricos o cambios de temperatura.
Las cremas faciales son fantásticas si desea aliviar el enrojecimiento debido al calor o los cambios de temperatura. Además, refrescan y hacen que la piel sea más suave y compacta. Las cremas corporales, por otro lado, combaten la fatiga de las piernas, que serán inmediatamente más ligeras y más descansadas. Además, la piel se verá inmediatamente más bella, compacta y suave. Estos productos también son una ayuda muy valiosa para combatir la celulitis : la frescura que causan parece estimular la circulación y combatir los depósitos de grasa.
Las cremas con efecto hielo no se recomiendan para las personas con piel muy clara o muy sensible, para las alergias o los problemas de circulación: en estos casos, es mejor usar solo gel de ducha y desodorantes, en lugar de sueros y cremas que podrían ser irritantes o dañinos.