Charlene de Mónaco todavía deja a los mellizos solos con Alberto

Charlene de Mónaco está a punto de regresar pero no es seguro que tenga el mismo papel una vez que esté en el Palacio junto a Alberto. De hecho, parece que el Príncipe confía más en otra mujer, concretamente en su hermana Carolina de Mónaco. El vínculo entre ambos siempre ha sido muy fuerte pero se ha fortalecido en los últimos meses.

Charlene de Mónaco reemplazada por Carolina de Mónaco

La prolongada ausencia de Charlene de Mónaco, debido a una grave infección de garganta, nariz y oídos que la obligó a someterse a múltiples operaciones bajo anestesia general y la debilitó enormemente, cimentó la relación entre Alberto y Carolina.Y cuando regrese, las cosas nunca volverán a ser las mismas. El Príncipe confiaba cada vez más en su hermana tanto en términos de deberes institucionales como en términos de educación de los gemelos, Jacques y Gabriella. Los niños, que cumplieron 7 años el pasado mes de diciembre, echaban mucho de menos a su madre y en la familia fue la tía Carolina quien ocupó su lugar.

Ahora que Charlene está por regresar, se supone que entre finales de mayo y principios de junio, se dice que las cosas no cambiarán. Al menos, no inmediatamente. Así lo afirma la revista alemana Bunte. Incluso si la Princesa no tiene intención de rendirse, especialmente con respecto a los niños.

Desde que regresó de Sudáfrica, lo primero por lo que luchó fue por la educación de los niños. Charlene se perdió su primer día de clases y también su cumpleaños, demasiado para una madre. Su intención no es dejarlos solos tanto tiempo.Alberto es un papá fantástico y los ha cuidado, incluso decidiendo llevarlos con él en varios viajes de estado, solo para tenerlos lo más cerca posible y evitar que sufran incluso por extrañarlo. Pero los compromisos del Principado no le permiten ser padre a tiempo completo y, en cualquier caso, una madre es insustituible.

Charlene de Mónaco, Caroline ha cruzado la línea

El mayor deseo de Charlene, que sin embargo difícilmente será posible, es mudarse con los gemelos a un apartamento privado, en lugar de residir en el Palazzo. De esta manera, la Princesa espera restablecer una relación sólida con sus hijos y recuperar el control de sus vidas. Pero los niños "pertenecen" al Principado y no pueden ser privados del papel que se les ha asignado.

De todos modos, Alberto le permitirá cuidar a los pequeños, como debe ser. Aunque, hasta que Charlene se haya recuperado por completo, comparte su tutela con Carolina.Estos últimos incluso habrían llamado a la directora de su escuela, un gesto que enfureció a Charlene, según relató France Dimanche, quien lo interpretó como una intromisión de su cuñada que habría ido más allá de los límites.

Alberto de Mónaco solo confía en Carolina

Por otro lado, la cuestión es un poco diferente en la gestión de los asuntos de Rocca. El Príncipe siempre ha confiado en los consejos de Carolina, quien creció en ese entorno y sabe cómo moverse, a diferencia de Charlene, que nunca aceptó completamente el estilo de vida del Palacio.

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